miércoles, 27 de diciembre de 2023

Cómo convertirse en una hija de puta

"- Madre, él me dijo que pensaba que iba a ser un infierno vivir conmigo mientras estuviera estudiando derecho. Dijo que yo era una especie de infierno. Eso es lo que me dijo.

- Yo era como tú -dijo mi madre-. Estaba decidida a estar soltera y divertirme y salir con muchos hombres. No me importaba lo que pensaran los demás".

Lorrie Moore, Anagramas, 1986.


Si Lorrie Moore fuera la autora de este texto, su título sería "Cómo convertirse en una hija de puta". El decálogo escrito al estilo Moore vendría a ser más o menos así:

Necesitas un propósito, una razón que te motive y que invierta la carga de la culpa. Eso te permitirá cerrar los ojos y dormir. A fin de cuentas, nadie elige ser villano porque sí.

Podrás ser más perversa si en verdad eres una víctima. No importa de qué o de quién. Eso es anecdótico: del sistema, de la sociedad, de la época. Da igual. Lo importante es que te hagas de una gran carencia, una triste y dolorosa historia que contar. Así podrás generar empatía en un pegajoso cúmulo de adeptos lo suficientemente crédulos y bienintencionados como para entregarte su confianza. Con ella vendrán confesiones, secretos, confidencias, información. Poder.  

Considera que aunque te llames Marcia, un apodo de "princesa Disney" será de gran utilidad para que tú misma creas el personaje que vas a interpretar, sin olvidar jamás tu objetivo de convertirte en un ser despreciable. 

Ahora bien, comienza desde el principio, en tu temprana infancia, rechazando la identidad que recibiste al nacer, y nace de nuevo, rebautizándote como Ariel o Bella o Nieves. Tu madre pensará que es un juego. Ella está demasiado ocupada discutiendo con tu padre para prestarte atención. 
Sé la adolescente que quieras ser. Nadie notará si te desvías. Rompe los mandatos familiares. Deja atrás la vida sin un peso de tus padres con sus divorcios de aristócratas. Estudia algo serio y prometedor como Contador Público. Fracasa mientras trabajas como asistente de producción en un magazine televisivo y animas fiestas infantiles los feriados. Luego, empieza cualquier otra cosa. Podría ser Publicidad o Dirección de Artes Escénicas. Tu tarareas los jingles de tu mostaza favorita mientras te bañas e imaginas que eres la estrella de un comercial que se estrenará en pantalla grande. Sin dudas, alguna de esas carreras te resultará mucho más facil. 

Cásate con un separado con dos o tres hijos en edad escolar, un tipo espléndido y de apellido patricio - podría ser Álzaga o Anchorena-. El te sumergirá de un chasquido en el ensueño von Trapp y tú dirás:
- Sí, quiero.
Múdate a una hermosa casa en Villa La AngosturaToma varias fotografías al cortar el pastel blanco en el hermoso jardín donde celebrarás tu boda con los pocos que paguen su ticket de avión para asistir. Sé madre. Ten una encantadora vida horneando budines. Vuelve a ser madre. Descubre que tú esposo te es infiel. Descubre también que te estafó. Él lo negará y dirá que estás loca. 
- Creo que deberías ver a un psiquiatra -afirmará mientras le susurras (para no despertar a tus niñas) que por un polvo, pensemoslo mejor, no hace falta romper la sociedad conyugal. Él no responderá.
Llega a tu casa al día siguiente y encuentra que el espléndido, infiel y estafador esposo de apellido patricio cambió las cerraduras. Intuye que no te hizo un juego de llaves. Visita a tu abogado. Descubre las irregularidades en las que estás involucrada. Recuerda la cantidad de papeles que firmaste. Piensa en lo estúpida que fuiste. Piensa durante horas.

Decide volver a Buenos Aires, de donde nunca debiste haberte ido. Sube a tus hijas al auto. Verifica a mitad de la desértica ruta que no tienes plata ni gasolina. Verifica que las niñas tienen hambre y sed. Seduce a un extraño y ruégale que llene tu tanque. Maneja 8 horas más con las niñas hambrientas. Llega a casa de tu madre. Ella vive en un pequeño departamento palermitano que huele a moho. Acuesta a las niñas en su dormitorio. Ve a la cocina a tomar el té que tu madre te ha preparado. Escucha el gran sermón que ella también te ha preparado. Pensarás que ya estás grande para una charla de chicas. Pensarás que la conflictiva relación que tuvo con tu padre no la califica para darte consejos, pero estarás demasiado desesperada y sin fuerzas como para luchar contra el único ser dispuesto a ayudarte.

Duerme un par de días en su sillón verde impregnado a caldo de gallina y telechimentos. Llama a todos tus contactos. Localiza a anteriores jefes y colegas.  Ve a 15 entrevistas. Falla. Ve a 15 más. Vuelve a fallar. 

- Todas las mujeres divorciadas que conozco son infelices.  
- Nombrame a una, mamá.
- Tú. 

Escucha más sermones de tu madre. Escucha los sermones de tu padre. Él cree que no debes seguir viviendo en casa de tu madre. En eso se ponen de acuerdo, los muy bastardos. 
Recibe llamadas telefónicas de tus amigas de Villa La Angostura. Escucha los chismes sobre la actual novia de tu ex. Escucha a tu abogado. Escucha los insultos de tu ex cuando le pidas dinero para la manutención de las niñas. Él se negará a dártelo y dirá que estás loca. 
Consigue un empleo. Trabaja duro. Consigue un departamento. Trabaja duro. Cría sola a tus hijas. Trabaja más duro. Acepta la ayuda de tu madre. Trabaja horas extras. Ahorra dinero. Ahorra más. Llega cansada a tu casa. Llega cansada a tu empleo. Duerme poco. Duerme mal. Lidia con tus hijas y con el resto del mundo. 

Conoce algunos hombres. Desepciónate. Ten con ellos relaciones ocasionales.
- Creo que voy a venirme, Marta. 
- Es Marcia. 
¿Qué?
- Mi nombre es Marcia.  
- Oh, sí, eso... Marcia.  

Cómprate un vibrador. Odia a tu ex por tu desdichada vida. Odia a tu jefe. Él mira mira tus tetas cuando le hablas. Odia a tus compañeros de oficina. Odia al sexo opuesto. 
Muevete a un mejor empleo como Analista Comercial para la categoría de Bebidas Espirituosas de una segunda marca de origen nacional. Mira esmeradamente los correos en tu ordenador. Observa a la gente. Es conveniente que pases un tiempo desapercibida. Escucha de qué y de quién hablan. Aprende. Sabes que tienes un gran talento y que llegarás a ser una extraordinaria hija de puta. Espera algunos meses y anímate a dar el siguiente paso. 
Acuéstate con el Gerente General. Él también mira tus tetas cuando le hablas. Eso no te disgusta. Necesitas un patrocinador, un visionario que esté dispuesto a  invertir en tu potencial. Practícale sexo oral en el palier de su apartamento el sábado a la mañana. Él empujará tu cabeza para que se la mames entera y tú pensarás en el adelanto salarial con el que pagarás la matrícula de preescolar. 
- Tenemos un balance negativo del 5,7 por ciento en este último cuatrimestre. Dile a Recursos Humanos que ticket de almuerzo, mis dos huevos, ¿sabes, cariño? ¿Y qué pasó con la instalación en el predio de San José que te pedí el jueves? ¿Todavía no tienes al negro que lo hace? - te dirá el lunes como si tal. Y tú pensarás en esmerarte más en la próxima mamada. 

"¡Felicidades por tu ascenso como nueva Jefa Comercial!" - celebra el letrero impreso con tu cara a escala gigante que está colgado en la pequeña cartelera al ingreso de tu sector. 

Descansa un poco. Diviértete. Conoce gente en los eventos nocturnos en los que eres auspiciante. Conoce el vértigo y algunos famosos. Descorcha champaign con ellos. Desliza cocaína sobre la mesa. Inhálala. Deja a tu hija de 11 años a cargo de la de 5: Sean buenas, mami las ama y debe irse al trabajo. Ellas piensan que es normal cenar soda, pochoclos y Snickers. Rúegale a tu madre para que se quede con las niñas el próximo fin de semana. Rúegale a alguna vecina para que te cubra en casa por la noche mientras consigues una niñera. Odia al padre de esas chicas. Almuerza con tu padre domingo de por medio. Él te hablará de su tercera esposa y tú te reirás de la vida de mierda que tiene esa perra. 

Mira departamentos a la venta en los clasificados de los sábados. Compra un espacioso tres ambientes en el Once. Múdate con tus hijas al 6to. Asiste a todas las reuniones de consorcio. Conoce a los vecinos. Habla mal de muchos. Habla bien de pocos. Consigue una buena ubicación en la cochera. Cambia el maldito auto que trajiste hace una década del sur, tiene el tapizado quemado por todas los cigarros que fumaste en la autopista. Estaciona con facilidad el nuevo utilitario naranja que pagas en cómodas cuotas. 

Asiste a los actos escolares. Compra los regalos navideños. Pasa las fiestas con tu madre. 
- Con la menopausia me di cuenta de que el único hombre que me hizo realmente feliz fue el instalador del aire acondicionado. Algunas mujeres tienen la menopausia antes de tiempo. ¡Salud, querida! ¿Tú ya estás menopáusica? 

Hazle un juicio a tu ex por la cuota de alimentos. Pierde el litigio. Piérdelo en todas las instancias. Ese malparido nunca debió nacer, pedazo de sorete. Entérate por medio de tu abogado de que tu ex despilfarra su dinero en una colección de Harley Davidson que está a nombre de su novia de turno. A ella le faltan por lo menos 20 años para la menopausia. Llama a tu amiga del 5to para que te acompañe al bar de la esquina por un whisky. Las chicas están dormidas, por suerte. 

Lleva a tu hija mayor a terapia todos los martes. La directora te ha informado de algunas conductas atípicas dentro de lo que se considera el desenvolvimiento normal de una preadolescente.
- Es algo retraída y tiene severas crisis de angustia - Afirmará. 

Cumplirás a rajatabla con el régimen. Lo que menos quieres es que se corra el rumor de que eres una madre irresponsable. La psicóloga te ofrecerá la ayuda del servicio social. Tu le dirás que tuviste algunos problemitas pero que estás trabajando en ello y romperás en llanto mientras le cuentas sobre los malos tratos que recibes de tu ex, la falta de compromiso afectivo y material que tiene con sus hijas y lo difícil que es la crianza para una madre sola y sin apoyo. Ella te dará una suave palmada en el hombro izquierdo y te pondrá en contacto con una organización de especialistas que acompañan a familias disfuncionales. Tu agradecerás y maldecirás por tener que vincularte a un grupo de fracasados. 
Deja de maldecir. Conoce a otras madres en situaciones adversas. Conoce sus injustas vidas. Vuélvete una activista en defensa de los derechos de las mujeres y abraza la causa. Consigue asistencia legal gratuita para obligar al sorete de apellido patricio a pagar, de una maldita vez, la cuota alimentaria. Él expondrá documentos que acrediten su insolvencia y cruzará la cordillera a Chile en un nuevo moto raid, mientras dice que estás loca. 

Mueve la pieza y avanza otro casillero. Ocupa tu posición como nueva Gerenta Comercial y graba tu nombre de princesa Disney (Ariel o Bella o Nieves) en las doscientas tarjetas corporativas que encargarás a tu muy bienvenido asistente. Él no mira tus tetas cuando le hablas. Él baja el volumen de la voz y responde como un suflé mal preparado que acabará en la basura. 
Despliega el organigrama e identifica aliados estratégicos. Planifica almuerzos casuales con los jefes de Administración y de Sistemas, ellos controlan la caja y la información. Será conveniente que, bistec mediante, les hagas tragar un poco de tu mierda y que endulces el café con edulcoradas preguntas sobre la vida de sus esposas y mascotas. Ese será el pase VIP para disfrutar de beneficios corporativos inigualables como fondos al día y acceso ilimitado a correos de colegas y directivosSiéntate y disfruta de la función. 

El suflé mal preparado te contará algo como que su madre sufre de una atípica y compleja enfermedad bronquial que requiere de costosos tratamientos, que el seguro médico se niega a pagar, etc. Tú comprenderás su enfado y las trágicas razones que lo obligan a ausentarse para luchar contra el caótico sistema de salud, pero cuanto menos trabaja él, más tengo que hacer yo. 

El Gerente General, con quien aún te acuestas, te pedirá que vayas a su oficina y mirará tus tetas cuando le hables. Luego, seguirá revisando sus correos y dirá:
-Haz lo que quieras con tu recurso. ¿De acuerdo, cariño?

Volverás a tu escritorio y hablarás con tu asistente. Le dirás que lo lamentas, que tú no haz querido exponerlo pero que la partida de las cien mil etiquetas para la edición Aniversario ha salido mal, que es lógico que dada la situación familiar que está atravesando cometa este tipo de errores, pero que desde hace meses que te preocupa su falta de atención. Di que en verdad lo sientes pero que ellos te han pedido que lo despidas. Incorpora a una nueva asistente. 
Lidera un grupo de cazadores. Ellos son arqueros con un talento innato para atravesar el corazón de los clientes con desgarradoras propuestas comerciales. Viaja de una ciudad a otra. Ve a ferias y convenciones. Vende cajones de bebidas espirituosas hasta embriagar a Cristo. Vende a pequeños mercados, a asociaciones mayoristas y a cooperativas rurales. Vende mucho. Vende más. Viaja por el país en la avioneta privada del Director de la compañía. Ruega que las chicas estén cuidando de tu madre. 
Termina de pagar la secundaria de tu hija mayor. Ella te culpa por la vida que tuvo y conseguirá un trabajo de mesera que le permita huir de tu casa. Tú odiarás al idiota del novio con quién se mudará dentro de algunos meses. El tipo no tiene roce social y es un perdedor que ascenderá cuánto mucho a barman en los próximos tres años. Tú hablarás del tema con tus amigas y les dirás lo ingrata que resultó esa hija. Ellas te aconsejarán que pongas tus expectativas en la menor. Tiene menos traumas y no se parece al sorete de apellido patricio. Además, tiene dotes para la actuación y el baile por lo que podría ser una excelente artista. 

Conviértete a tiempo completo en la empleada del mes. Inaugura una nueva oficina con un nuevo ficus y una nueva insignia profesional como Directora de Nuevos Negocios. Sube a la cima. Ve a exclusivos cocktails con exclusivas carteras violetas. Obtén bonificaciones a fin de año. Brinda por el éxito de la compañía, paga y cobra abultadas comisiones, y lleva a tus hijas a Orlando los próximos veranos

Entérate de que el Gerente General será despedido. Haz una llamada telefónicaHabla con el CFO. Él te contará lo de los sobreprecios con absoluta discreción. Tu dirás que es imposible que Villegas esté involucrado en algo tan turbio y pensarás que el muy cretino va a salpicarte con su mierda. Vuelve a tu departamento en Belgrano. Sube a la cima del estrés. Asiste a un exclusivo y urgente té en lo de tu madre el sábado a por la tarde y luce tus exclusivas ojeras de color violeta. 
Ella te dirá que no puedes seguir así y te invitará a una cadena de oración a la que asisten algunos divorciados los domingos en la parroquia del Santo Espíritu. Tú iniciarás una cadena de oración para salvar tu pellejo
El lunes llegarás a primera hora. Deberás anticiparte o quedarás desvinculada. Irás directo al departamento de Recursos Humanos y presentarás una prescripción médica con el pedido de una extendida licencia psiquiátrica. Si lo logras, renuévala tantas veces como te sea posible e iníciale una demanda a la compañía durante el proceso. Finalmente, regalate una generosa indemnización y vuelve a llevar a tus hijas a Orlando durante el verano. 

Lorrie hablaría con su editor y presentaría un borrador con dos o tres versiones de tu historia. Incluso llegaría a escribir una en la cual el sorete de apellido patricio no es tan sorete (al menos no lo es desde el principio). 
En ella los Von Trapp llevan una pacífica vida en Villa La Angostura hasta que tú te aburres y te encamas con su socio y mejor amigo. Él juega al tennis y hace el amor mejor que tu esposo, y tú intuyes que el semisorete de apellido patricio no es el padre de tu segunda hija.  
La escritora desestimará la exploración de esta trama porque vulnera la esencia de tu personaje. Tú éres una víctima. ¿Recuerdas?

Pensarás en todas las combinaciones posibles. Nada más imperfecto que lo ideal, dirás, y te enfocarás en tu segunda hija. Ella también tiene dotes para la actuación y las tetas grandes, y necesitará una buena y conmovedora historia para contarle a los productores teatrales. 








Un chocolate de pistacho rosa

 Un terrón de luna 

Un pompón de azucar en el cielo.

- ¡Eso no es poesía, niña!
¿A qué el desvelo?

- Quizá un café, mañana 
Un turrón de caramelo.

Descalza el alma en la noche
Danza y gira, y en un lucero
Detiene la cadencia del reloj, el relojero: 

- ¿Quién pudo haber sabido 
Un chocolate de pistacho rosa? 
- La criatura más hermosa.