Ya no sé, porteño mío, hermoso mío,
Qué primaveras o qué flores.
Sólo recuerdo que fue en septiembre,
Y caminamos por una plaza,
En donde nunca nos besamos.
Yo no sé, desvelo mío, varón mío,
Cuántos inviernos o cuántas penas.
Sólo, que dije adiós - y alguna estupidez -
Porque tenías miedo y prisa,
Y nos quedamos abrazados
Girando, como en un tango.